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El Camino de los Sentidos Trailer 2

camino de los sentidos

Santiago de Compostela. Fin de la Aventura


Sábado, 11 de Agosto
Santiago de Compostela.


Al día siguiente, me levanté y me acerque al Super a comprar el desayuno, croissant recién hecho, napolitana de chocolate y por supuesto, batido de vainilla. Llamé al Sr. del hostal para preguntarle si podíamos dejar las alforjas en la habitación hasta la noche en que salía nuestro autocar para Madrid. Nos comentó que tenía la habitación alquilada pero que nos las guardaría en su otra pensión que estaba al lado.

Después de dejar las alforjas y meter una botella de agua en el congelador nos fuimos a la Misa del Peregrino, sabíamos que era a las doce y aunque llegamos a menos cuarto estaba lleno, no teníamos sitio donde sentarnos y nos tuvimos que quedar medio sentados en una de las columnas de la Catedral. Cuando empezaron a nombrar a los peregrinos, fue emocionante pero cuando dijeron desde Burgos: dos de Madrid, sentí que las lágrimas resbalaban por mis mejillas. ¡Qué pena que este día no pudiera verse el botafumeiro!.

Después de la misa, estuvimos abrazando al Santo y allí coincidimos con el valenciano del Alto del Poio que nos comentó que acababa de llegar y que su autocar salía enseguida. Nos dimos cuenta de que la mayoría de los peregrinos regresaban el mismo día de su llegada pero nosotros habíamos decidido quedarnos un día más en Santiago.
Aunque no lo pensamos bien, deberíamos haber alquilado un coche para ir a Muxia y Fisterra, pero bueno de los errores se aprende.


Aprovechamos la tarde para ultimar las compras y traer algo de recuerdo a nuestros familiares y de allí como aún nos quedaba tiempo fuimos a la Pl. del Obradoiro, nos sentamos en el suelo viendo pasar a unos y a otros.
De pronto, los de Murcia nos saludan ¡no sé cuantas veces coincidimos con ellos en el camino!, pero más tarde son los chavales del Albergue de Arzua los que nos que se paran a hablar con nosotros.


De allí decidimos ir a por las bicis, sabíamos que el camino a la estación era todo cuesta arriba y pensamos en ir poco a poco. De camino a la pensión nos encontramos con los ciclistas de Bilbao, estuvimos charlando un rato con ellos y nos despedimos porque ya salían de regreso.
Con las bicis preparadas salimos en dirección al casco antiguo y en una de las calles vimos a Maribel, la peregrina de Vendas de Narón y aprovechamos para devolverle su mechero.

Y de nuevo ¡cómo no! volvimos a la Pl. del Obradoiro, queríamos verla por última vez y según llegábamos oímos gritar: ”Mari mete el uno”, nos paramos y nos echamos a reír, eran los peregrinos con los que habíamos coincidido en la famosa cuesta de Boente cuando yo le gritaba a Mari la famosa frase. El chaval que aunque iba a pie también era ciclista nos decía que esa cuesta ni con el uno. Nos hicimos fotos con ellos y salimos de la Plaza dejando atrás lo que tanto habíamos deseado.
Paramos a comprar las típicas tartas de Santiago y nos invitaron a unos chupitos y desde allí ya si, directos a la estación de autobuses.



Nos cambiamos de ropa, dejamos la ropa de ciclista y nos pusimos de calle esperando que llegara la hora de la salida.

Coincidimos con dos biciclinos japoneses que nos contaron que salieron de Paris y llevaban dos meses en el Camino.


El viaje fue una maravilla, estábamos tan cansados que lo pasamos durmiendo casi todo el camino. Desde Villalba hablamos con nuestra hija para que nos fuera a recoger y efectivamente cuando llegamos a Madrid allí estaba, cargamos las bicis en la Multipla y comenzamos camino a casa dando por finalizada esta aventura.

Etapa 9: Arzúa - Santiago de Compostela

Viernes, 10 de Agosto de 2007

Etapa 9: Arzúa - Santiago de Compostela


Despertar en Arzúa, si por la noche nos costó dormirnos con los borrachos y los ruidos, por la mañana nos despertaron ídem de lo mismo, comienza la carrera por ver quién sale antes y los ruidos y linternas se adueñan de la habitación, frases para el recuerdo (no lo encuentro, ¿dónde está?) ( yo deje aquí los calcetines), (se me ha roto la cremallera ), (déjame la linterna, la mía no funciona ) (date prisa están esperando) y así muchas más frases que amenizaban el madrugón al que nos han sometido, salen al pasillo y me levanto al baño, imposible entrar el largo pasillo parece la línea de boxes de un gran premio, mochilas contra las puertas y el grupo de borrachos que sigue sin encontrar la ropa, poco a poco va cesando el ruido y nos quedamos solos, descansamos de esta paz y una hora más tarde nos levantamos, nos aseamos y preparamos las alforjas, dejo la llave del garaje en recepción y el ritual de todos los días la bomba y el inflado de la rueda de María, coloco las alforjas y nos ponemos los guantes, con un poco de pena, nos miramos y los dos sabemos que esta es nuestra última etapa, pero a la vez con ganas de llegar.

Salimos por la calle del albergue y en el cruce a la izquierda donde una señal de tráfico indica Santiago, vamos por el arcén y el camino esta paralelo , pero por el van una legión de peregrinos, imposible ir con la bici por el camino porque aparte de molestar su marcha entorpecería la nuestra, además todos los biciclinos circulábamos por el arcén siendo en algunas ocasiones una fila interminable, intentaríamos adelantar a todos y luego meternos al camino, como hicimos del Burgo de Ranedo a Mansilla de las Mulas.

Llegamos a un pueblo pequeño AS BARROSAS y aquí la carretera se empina, tomamos a la derecha y en un área de descanso desayunamos unos lazos y un batido que compramos en Arzúa, después salimos con fuerzas renovadas y al rato nos pasan el grupo de Bilbao como siempre el que va de escoba se queda charlando con nosotros, después se despide (a ver si nos vemos en Santiago), en una larga recta nos adelantan el grupo de franceses con la niña al frente nos saludan y vamos detrás de ellos, adelantamos a otros biciclinos y otros nos adelantan, el arcén es un coto privado para biciclinos, entramos en una zona muy bonita con bosques que dejan solo libre la carretera por cierto muy buena y con un arcén muy grande, las rectas nos acercan cada vez más a Santiago.

Al fondo unas casas, llegamos a SALCEDA donde paramos para sellar en mesón Esquipa y este lleva el símbolo jacobeo, desde aquí al siguiente pueblo fuimos con los peregrinos, pero decidimos salir de nuevo a la carretera pues nos obliga a cruzarla muchas veces y en una de ellas seguimos por el arcén, en este tramo pasamos pueblos muy pequeños, OXEN, RAS, BREA, A RABIÑA, después ¡como no! en subida llegamos a O EMPALME, aquí cojo 2 sellos Mesón O Empalme y Mesón Raxeira, salimos a pedalear y seguimos subiendo en dirección al Alto de Santa Irene, nos costó bastante, después una gratificante bajada nos lleva al pueblo de A RUA.

Saliendo de éste comenzamos a subir, más tarde llegamos a la gasolinera donde paramos a descansar y a hinchar las ruedas, salimos para terminar lo que quedaba de subida, esta ya por la calle principal de PEDROUZO, al igual que en Melide muchos coches en doble fila. En la parte alta del pueblo está el centro con tiendas y bares, desde aquí comienza la bajada, antes de salir del pueblo paro a comprar unos plátanos, mientras María sigue pedaleando, la tienda está llena por lo que tardo un rato, después salgo y pongo el plato 3 bajando a 55 kilómetros por hora pero no veo a María recorro 4 kilómetros y ni rastro, decido bajar el ritmo y esperar a cogerla poco a poco, por fin la veo, está parada esperándome, llego a su altura y me dice que ¿cómo tardo tanto?, le cuento lo de la tienda y seguimos el camino.

Pasamos el puente del rio Brandelos y comenzamos la subida, esta no nos exige mucho pues es más suave, de nuevo la bajada nos lleva a otro pueblo AMENAL pasamos el rio y María se para en el arcén y yo a su lado, llega un biciclino y nos echa la bronca y con razón miro para atrás y vienen lanzados para subir la cuesta, le digo a María que se quite y yo hago lo mismo, pero el peso de la bici me desequilibra y se me escapa un pedal, con lo que el otro me golpea en la otra pierna haciéndome las marcas del mismo por lo que comienzo a sangrar, no le doy más importancia pues después de lo de Fromista esto no es nada, aunque me fue doliendo mucho rato.

Esta subida si se hizo muy dura, subimos con el plato uno y el reguero de biciclinos no se acaba, nos alcanzan los de Murcia, paramos a beber agua y mientras descansamos pasan el grupo de franceses con la niña en cabeza, la fila no se corta, se detienen dos biciclinos de Santiago que están haciendo el camino por una promesa pues su compañero salió de un accidente bastante gordo.

 Comenzamos a pedalear y llegamos a lo más alto, allí hay una rotonda, de la que sale la autopista a Santiago y un cartel indica prohibido a peregrinos y bicis. Nosotros la bordeamos y cogemos el camino, a partir de aquí hay que ir muy despacio pues somos muchos en el camino, vamos paralelo a la autopista, en bajada llegamos a LAVACOLLA, en este pueblo paraban los peregrinos a lavar sus ropas y maltrechos cuerpos.


Las flechas nos llevan por caminos, bordeando la calle principal pasamos por un bar que está lleno de peregrinos, sello en casa Borta de Santiago, salimos de Lavacolla y las flechas nos mandan a la izquierda, el mojón con una bota rota encima precede a una dura cuesta la cual nos obliga a empujar las bicis, llegamos arriba y nos paramos a descansar y vemos a los de Murcia empujando, luego el chaval baja corriendo para ayudar a su hermana que no puede con la cuesta, mas tarde llega la Guardia Civil y nos dicen que quedan cuestas más duras, hay que tomárselo con paciencia y así lo hacemos, vamos por una carreterilla rodeada de arboles, llegamos a NEIRO y un giro brusco en una calle y en subida me deja sin el desarrollo adecuado lo que me obliga a poner pie a tierra y es que el peso se nota mucho en estos cambios, después de esto una bajada entre arboles nos lleva sin esfuerzo.

 Dejamos a nuestra izquierda un camping y llegamos a un cruce que hay unos bares, paro a sellar pero están a tope por lo que no hay quien pase, seguimos el camino y pasamos T V Galicia, una curva a la izquierda y luego una carreterilla en bajada, pasamos T V Española, donde en una subida María tiene que frenar pues un coche invade su carril esquivando peregrinos que van por la carretera.



Llegamos a el pueblo de SAN MARCOS y pregunto ¿qué cuanto queda para Monte de Gozo? me dice, hay mismo unos metros más arriba. Pedaleamos un poco mas y por fin llegamos al MONTE DE GOZO, a nuestra derecha se encuentra la Ermita de San Marcos, paso a sellar y María a rezar, cuando salimos vemos que la pequeña valla de piedras que rodea la capilla está ocupada en su totalidad por peregrinos descansando, algunos descalzos curándose las ampollas, miro el camino y entran por cientos tanto andando como en bici, subimos al monte, donde está el monumento conmemorativo de la visita del papa Juan Pablo II en 1992, donde no hicimos unas fotos, desde aquí se ven las Torres de la Catedral.

Luego bajamos y cogimos las bicis, bajando pasamos el albergue pero no puedo sellar pues está cerrado, más abajo las flechas nos llevan a unas escaleras lo que nos obliga a retroceder y bajar por la carretera, entramos en una rotonda con coches, bicis y peregrinos por todos lados, vamos subiendo y me detengo a sellar en el bar el Caminante, desde aquí llegamos a un cruce donde las flechas mandan por una calle prohibida, los peregrinos van por la pequeña acera, de pronto llegan los biciclinos de Santiago que vimos etapa atrás y nos dicen que les sigamos pero que vamos despacio pues su amigo está mal del accidente de tráfico, llegamos a un semáforo y me indica donde está la estación de autocares.

Desde aquí la bajada, mientras él y yo vamos hablando María se encamina delante a las puertas de la Catedral, a nuestra derecha se queda el Convento San Francisco en la calle del mismo nombre, las tiendas a nuestra izquierda. Miro a las tiendas y el peregrino que va delante se para de golpe y yo casi me lo trago, aviso a María del peligro y es que entramos tantos a la vez que no hay sitio para todos, la calle se acaba y comienza la PLAZA DEL OBRADOIRO, entramos y la vista no sabe a dónde mirar pues tantos peregrinos desbordados por la emoción, algunos grupos cantando, el cuerpo se estremece y las lagrimas salen sin querer, no sé si a todos les pasa, lo que si veo son caras de satisfacción, algunos se sientan pensativos tal vez estos son los que vienen de más lejos.

Nos hicimos unas fotos y el chaval de Santiago nos lleva a la oficina del peregrino, aquí hay una cola que asusta, nos dice que él vuelve por la tarde que hay menos gente, nos comenta que se tiene que marchar y nos deja al lado del hostal.

Nos despedimos y bajamos a la Plaza Roja, la calle Frey Rosendo Salvado, 4 – 4º piso, subo y baja el dueño conmigo a guardar las bicis en un garaje que también es taller de coches, y cuando cierran el taller cierran todo, me da una llave y nos dirigimos a otra calle donde tiene otra casa con todo habitaciones. Está junto al Carrefour exprés, até las bicis a una farola y subimos las alforjas, como estábamos cansados nos quedamos un poco descansando, planeamos nuestra estancia en Santiago, decidimos sacar los billetes de regreso y me fui a la estación mientras María se quedaba duchándose.

Cojo la bici y sin alforjas parece que vuela, paso las calles Fonte de Santo Antonio, Transito da Merced, Virxe das Cerca, San Roque, Santa Clara, Basquinos, Pastoriza, Plaza de la Paz, creía que iba a ser un paseo pero las cuestas me obligan a bajar e ir andando por la acera, por fin entro en la estación de autobuses pregunto y me mandan al mostrador de ALSA, solo dos personas delante de mí, al que están atendiendo no le solucionan el problema, por fin le toca al de delante y cuando le van a atender se cuelgan los ordenadores y no saben cuánto puede tardar, el señor de delante charla conmigo y me dice que ha hecho el camino Portugués, el de al lado me dice que salió de Sevilla y ha hecho la ruta de la Plata, un señor de Madrid nos dice que él ya había hecho estas y que él este año acababa de terminar la del Norte en bicicleta, se quejaba de su mala señalización, nos dijo que el año pasado salió de Roncesvalles.

A todo esto el despacho de billetes sigue sin funcionar y las piernas comienzan a dolerme ya vamos para media hora, por fin pueden atender y cuando me toca a mi saco dos billetes para mañana a las 21.30, cuando salgo la cola llega a la calle, cojo la bici y emprendo el regreso al hostal, no tardo nada pues es todo bajada, en la puerta del hostal suena el móvil, es María que está preocupada, subo a la habitación y me pregunta que como he tardado tanto, le cuento lo ocurrido y menos mal que no vino conmigo, al menos aquí descanso que falta le hacía.

 Nos lavamos un poco y bajamos a comer, casi enfrente en la cervecería Internacional, donde comimos bien y tranquilos, después nos subimos al hostal a ver la tele y en la cama no tardé en dormirme, María duro algo más pero también cayó en sueño.

Cuando nos despertamos, bajamos y cogimos las bicis para llevarlas al garaje, llegamos y había más bicis, las atamos y nos fuimos a pasear por Santiago. De vuelta pasamos a comprar Acuarios, helado, bollos y batido y lo metí en la nevera del hostal,

Después nos fuimos al casco viejo y entramos frente al parque por puerta Faxera—Rua Do Franco, cogemos la rúa do Vilar y fuimos a la Oficina del Peregrino para recoger la Compostela, es un edificio antiguo frente a la plaza Platerías y la cola cruza la calle, poco a poco vamos avanzando y llegamos a un portalón donde dejan los palos los peregrinos, hay un montón, la cola avanza muy despacio y además continua hasta el piso de arriba, en la cola charlamos unos con otros y cada uno cuenta su historia, los tres chavales de delante venían de hacer la vía de la plata salieron de Salamanca por Zamora, Puebla de Sanabria, Orense etc.. y ya habían hecho el camino de Santiago tres veces.

Nos vamos aproximando, María descansa sentada en los escalones de madera junto a otras peregrinas, por fin nos toca María por un lado y yo por otro nos sellan y nos dan la Compostela compramos un tubito para su traslado, luego nos dirigimos a la salida pero no lo podemos hacer pues la puerta está cerrada, por fin nos abren y cuando salimos la Plaza de Platerías estaba llena de personas sentadas en las escaleras viendo una actuación de un grupo de humoristas, de camino vemos mucha gente viendo otra actuación, esta vez nos quedamos a verlo se trata de un hombre disfrazado de bruja con una escoba gigante en la que montan 3 ó 4 personas y hacen como si volaran para en ese transcurso hacerse las fotos, lo hacía bien además del numero que montaba, se enrollaba con la gente y menudo cachondeo.

Desde aquí entramos en la plaza del Obradoiro, los peregrinos se agolpan por todos lados, biciclinos tumbados en la plaza, otros cantando, es digno de ver, mientras cruzamos la plaza vemos entrar a pie y en bici, los que llegan ahora en su cara se ve satisfacción y a la vez cansancio, algunos cojeando por las ampollas.


Nos vamos a ver tiendas por la calle San Francisco, de vuelta cruzamos la plaza y nos vamos a buscar un bar donde cenar, al final optamos por raciones en uno que tiene un comedor al fondo y con aire acondicionado, nos viene al pelo pedimos pulpo y chipirones, cenamos bien y nos fuimos de nuevo a ver tiendas por las calles, preguntamos por una heladería , pero no dimos con ella y emprendimos el camino al hostal, cuando llegamos puse la tele y llamamos a nuestras familias, el ruido de la calle se hacía notar pero aun así el cansancio y el sueño pudieron más y nos dormimos.

Resumen de etapa:

ARZUA - SALCEDA - SANTA IRENE - RUA -  PEDROUZO - LAVACOLLA - SAN MARCOS - MONTE DE GOZO - SANTIAGO DE COMPOSTELA

KM. TOTALES  514,750
KM. DIA  44,200
VEL. MAX. 33,6
VEL. MEDIA  17,6
TIEMPO TOTAL 2,31 H

Etapa 8: Vendas de Narón - Arzua

Jueves, 9 de Agosto de 2007

Etapa 8: Vendas de Narón - Arzúa


Suena el primer despertador en forma de móvil y el grupo de chicos y chicas junto con la italiana comienzan a hacer ruido sin parar, bolsas que no paran de sonar y ruidos de todo tipo, esos calcetines no son tuyos, de pronto un chaval se encara con otro, te has puesto mis gallumbos, todo esto a oscuras y con las linternas haciendo ziz –zaz en el techo, la hazaña dura lo suyo, cuando por fin sale el último me acomodo e intento dormir, son las 5.30 de la mañana y el silencio se adueña de la habitación. De pronto vuelven a entran dos chicas buscando un tanga, otra vez linternas para arriba, linternas para abajo, seguro que se lo ha puesto el de los gallumbos, por fin se marchan, me levanto al servicio y trato de cerrar la puerta por dentro, por si vuelven ¡que lastima no puedo!, pues no tiene cerrojo.

 Me acuesto y de nuevo el silencio, consigo dormir un poco. El despertar esta vez es más normal, la luz que entra por la ventana me hace abrir los ojos, poco después me levanto y salgo a ver las bicis, el frio es considerable y una especie de niebla no deja ver los valles, eso junto con el rocío parece como si acabara de llover. Miro las bicicletas y parecen nuevas, de pronto veo un caracol en la rueda se pasea por el costado del neumático, bueno mientras que no se nos suban en marcha todo irá bien, miro la rueda de María y esta deshinchada, como todas las mañanas, saco la bomba para calentar los brazos y después de hincharla entro en el albergue donde sólo está María, está dormida, para dejarla un rato más me distraigo en ver la ruta.

 Desde donde estamos a Santiago nos quedan menos de 80 kilómetros, miro los pueblos que pasaremos, así como la altitud y ¡cómo no! lo que ver en cada pueblo, por ejemplo, el pulpo de Ezequiel en Melide. Miro la situación del albergue que tenemos reservado en Arzua se trata del Vía Láctea, poco después despierto a María, se hace la perezosa, no sé si por miedo a hacer otro montón de kilómetros o por sueño, la dejo un rato más y por fin se levanta, después de asearnos comenzamos a colocar todo en las alforjas, salimos con todo a la calle, colocamos las alforjas en las bicis y nos fuimos al bar a desayunar.

Mientras nos sirven, Adelina nos comenta que el grupo de peregrinos han dado bastante guerra, pues habían sacado todo lo de las mochilas buscando, no sé qué y estuvieron más de una hora en el bar, le cuento el despertar que dieron en el albergue y no le extraño ni lo más mínimo, le preguntamos qué tal esta el camino y si tiene cuestas, nos dice que ahora es todo subida, que tenemos que cruzar la sierra de Ligonde, después de desayunar nos despedimos y salimos a coger nuestras bicis hambrientas de devorar kilómetros.

Minutos después salimos de VENDAS DE NARON, vemos a dos peregrinas haciéndose fotos en la capilla la Magdalena y en el mojón de 77 kilómetros, esta aldea con sus cuatro casas fue en la antigüedad un lugar muy importante en el camino, donde reponían fuerzas los peregrinos antes de cruzar la sierra, además era principio y fin de etapa entre Portomarín y Palas de Rei.

Comienza aquí otro día en el camino, miro para a delante y es un reguero de peregrinos, es subida y las piernas no están calientes por lo que nos cuesta bastante, yo sin pensármelo paso directamente al plato pequeño y piñón grande, miro a María y esta mareada y con ganas de vomitar, seguimos subiendo y llegamos al alto de Ligonde 756 metros, por fin comienza la bajada, esta es asfaltada pero muy estrecha está llena de curvas pero el trazado es bueno y no tiene peligro alguno.Pasamos una pequeña aldea llamada PREMISA, poco después llegamos al cruceiro de Lameiros que queda a nuestra izquierda, este uno de los más importantes del camino, fue construido en 1670.


Entramos en LIGONDE, pueblo jacobeo que conserva un antiguo cementerio de peregrinos, anexo a un hospital de la Orden de Santiago, nos llamo la atención al final del pueblo el alberge donde el cartel en la fachada ( sello- café – agua y aseos gratis para los peregrinos ), paramos a coger el sello y el hospitalero era el que me indico el día anterior en Hospital de la Cruz, este había hecho andando el día anterior Portomarin—Ligonde es decir su albergue, mientras María habla con él, yo sello y hago unas fotos al albergue, dentro las gruesas paredes de piedra y los suelos de pizarra, al fondo las colchonetas donde llegada la noche ocupan el suelo en su totalidad, ya en la calle los peregrinos se acumulan para coger el café y algunos llenar la cantimplora en una fuente un tanto especial que tiene grabado en la piedra en su parte baja la vieira y en su parte alta “ La Fuente del Peregrino”, para no ser menos lleno las garrafas., mas tarde nos despedimos y de nuevo a pedalear.

Esta cuesta abajo nos conduce al puente del rio Ligonde, pasamos este y una subida corta pero empinada nos deja en las puertas del siguiente pueblo AIREXE, del centro parten cinco carreteras para diferentes pueblos, pero está muy buen indicado. Aquí hay dos albergues el de la derecha, Pensión Firese, me llamo la atención el sello pues te resalta “Animo Te Falta Poco”, después cruzo la calle y paso al restaurante Conde de Waldemar, nada más entrar me encuentro a la derecha una mesa con un torno, pinzas, tijeras, cuellos, jacles y todas las cosas necesarias para el montaje de moscas, le pregunto al camarero por el que hace las moscas y me dice que es su jefe, que viene al medio día y que todas las tardes se pasa montando moscas, según su jefe pasan muchos peregrinos pero pescadores de moscas ninguno, que lastima que no estuviera, para aprender técnicas diferentes de montaje, ya se sabe cada maestrillo tiene su librillo, después el señor me pone el sello y este tiene otras palabras “La Magia del Camino”, este acompañado de un sombrero chistera, original y diferente a los que tengo.

Me despido del señor y cojo la bici comienzo a pedalear para alcanzar a María pues mientras yo paré a sellar ella siguió el camino, pero en hablar y hacer fotos se me fue el santo al cielo, con bastante esfuerzo consigo pasar varios grupos de biciclinos y al fondo en una subida doy caza a otro grupo subiendo una cuesta de narices, los voy adelantando y por el medio veo a María, los rebaso y más adelante paro para hacerles una foto.



Al llegar arriba María me dice que sigue mareada, descansamos un poco y de nuevo a pedalear, más adelante el cruce PORTOS, desde aquí sale una carreterilla que conduce a la Capilla y a O Mosterio, este está a 4 kilómetros pero no fuimos, un kilometro más adelante llegábamos al siguiente pueblo LESTEDO, pasamos este y comenzamos a bajar, llegamos a la parte mas baja y desde aquí comienza una subida que se hace pesada, María tiene que parar pues el mareo no se le quita, nos detenemos a la entrada del Rectoral de Lestedo, donde María pasa un rato muy malo, por fin vomita y parece que se le pasa el mal cuerpo, en ese transcurso de tiempo entro a coger sello al rectoral.

Después con María un poco mejor comenzamos a pedalear y después de los sube y baja típicos de Galicia llegamos a OS VALOS, pasamos este y al fondo se ven las primeras casas del siguiente pueblo, al que no tardamos en llegar, A BREA, casi a continuación se llega por una corredoira a otro pueblo ABENOSTRE, aquí los peregrinos se van juntando, pues el final de etapa esta cerca, por las corredoiras esta vez con menos subidas vamos cómodos circulando entre biciclinos y los de a pie, llegamos a una zona donde en el camino vendían frambuesas en unas cestas de plástico, pero pasamos de largo más adelante paramos a descansar y María comentó que creía que íbamos a parar a comprar frambuesas, la verdad es que yo también me quede con las ganas y desde donde estábamos era un tirón dar la vuelta.
María se encontraba mejor de lo mal que lo había pasado, después nos pusimos en marcha por un bosque de eucaliptus por unas corredoiras que despertaban el sentido del olfato, el sol apenas pasa por los tupidos arboles y en sus troncos marcas de peregrinos de años anteriores, pasamos otro pueblo AS LAMELAS y enseguida O ROSARIO, desde aquí subimos por el camino y en la parte más alta, vemos el pueblo todo en bajada, lo primero que nos encontramos es el área de descanso, que parece un camping, con fuente, servicios y oficina de información, donde aparte de ayudarte con la información necesaria te dan folletos del camino, esto es del Concello de Palas y está gestionado por el ayuntamiento, justo enfrente está el albergue, salimos y a escasos 200 metros entramos en el pueblo, PALAS DE REI, el primer bar , O.Cruceiro está lleno de peregrinos, entro a sellar y sorpresa los de los gallumbos de las 5;30 de la mañana me ven y enseguida me saludan, les digo que donde van adormir para no coincidir y también que pongan un montón de velas en Santiago por lo mal que se han portado, nos reímos un rato y como dicen en estos casos "cosas del camino",

 María me espera en la calle la cual cruzamos por la acera que bordea la iglesia, nos encontramos con el cura y nos manda a la sacristía a sellar la credencial, dejamos las bicis en la puerta y entramos, María se puso en la primera fila a rezar, mientras yo pase a la Sacristía, allí una chica no se cansa de poner sellos y nos pone dos ( Parroquia de San Tirso ) y el otro ( Diócesis de Lugo ), detrás de mi otros peregrinos con la credencial en la mano esperan su turno. Salí de la iglesia y María se quedó haciendo unas fotos a una vidriera muy bonita. Nos sentamos en el poyete que rodea la iglesia y nos comimos los lazos con batido de vainilla, María con miedo pues estaba con mal cuerpo, pero le sentaron bien.

Cuando nos decidimos a emprender la marcha las flechas nos llevan a unas escaleras !en fin no pensaron en los biciclinos! nos damos la vuelta y por la acera bordeamos la iglesia, nos dirigimos al cruce desde aquí calle abajo, sello en el bar La Juventud y en la Pensión Vilariño, pasé al Ayuntamiento donde me sellaron y me dieron unos folletos del camino, cogemos por la calle de la fuente y las flechas nos obligan a cruzar la carretera.

Al otro lado nos espera un camino hecho de pizarras con cemento para poner a prueba los empastes, pero las flechas así lo indican, giramos a la izquierda y más tarde a la derecha para salir a la carretera a escasos 60 metros de donde nos metimos, veo a los peregrinos por el arcén para evitar la vuelta que hemos dado y es que son peregrinos pero no tontos.

Enfrente las flechas nos meten por el camino y aquí los peregrinos y biciclinos vamos en masa, después de una vuelta por las afueras del pueblo salimos a la carretera a escasos 100 metros de donde empezamos, esta vez picamos todos, yo creo que lo hacen para evitar aglomeraciones por el arcén, pero esto obliga a cruzar la carretera de un lado a otro, muchas veces con el consiguiente peligro, estamos en ALDEA DE RIBA, aquí por el camino otra vez más de lo mismo. Entramos en GAIOLA DE RIBA, llegamos al cruce de la carretera y miro el mapa, desde aquí el camino es un tanto difícil con fuertes subidas y bajadas, visto esto y viendo los biciclinos por la carretera, decidimos seguir por el arcén, llevamos un rato pedaleando y vemos al grupo de los bilbaínos, el que marcha el ultimo de escoba se queda un rato con nosotros, nos vuelve a decir que si queremos nos llevan el equipaje en la furgoneta de apoyo, le decimos que no, pues a estas alturas las fuerzas son muy limitadas y no sabemos hasta donde podremos llegar cada día, después de un rato de amena charla se despide y haber si nos vemos ¡buen camino!

Nos quedamos solos aunque el reguero de biciclinos es constante, miro para atrás y se acerca el grupo de biciclinos franceses capitaneados por la chica pequeña, que es la que pone el ritmo. Un poco más adelante, comienzan subidas y el grupo francés se paran a descansar, nosotros seguimos y cuando llegamos arriba el descenso suave nos lleva hasta LEBOREIRO, desde aquí hasta el rio seco todo es bajada, paramos a descansar en un área de descanso, nos tomamos una barrita energética y en el prado de al lado un pequeño poni pasta ajeno a lo que se mueve a su alrededor.

Pasan mas biciclinos y nosotros nos preparamos para salir, como es bajada salimos sin pedalear, cruzamos el rio y comenzamos a subir, a nuestra izquierda el sendero es una fila interminable de peregrinos, pues transcurre pegado a la carretera tanto que algunos circulan por el arcén, dos de ellos van en paralelo y nos obligan a ocupar toda la carretera, menos mal que no hay coches, al menos en este momento.

Comenzamos el descenso al puente del rio Furelos, lo pasamos y comienza una subida suave pero continua, pasamos FURELOS, las casas del pueblo se unen al pueblo grande, estamos en MELIDE, seguimos subiendo con mucho tráfico, coches aparcados a ambos lados, entramos en la gasolinera a echar aire a las ruedas y después nos cuesta incorporarnos, hay mucho tráfico, peregrinos a pie y en bici, por fin cruzamos y seguimos subiendo hasta la iglesia que está cerrada, justo enfrente estaba La Pulpería EZEQUIEL, estamos intentando atar las bicis en la puerta, sale Ezequiel y nos manda a la trasera del bar donde hay una puerta de servicio, metemos las bicis dentro y nos vamos a coger el plato de pulpo y el dueño nos dice que las bicis están mejor dentro pues alguna vez han dejado a alguno sin bici y que tengamos cuidado de aquí para adelante.

 Me hice una foto con él y puse el sello, cogimos el pulpo, el pan, las coca colas y nos fuimos a la mesa situada a escasos metros de las bicis, me ha metido el miedo de quedarnos sin nuestras súper maquinas. Empezamos a comer, por cierto estaba de lujo, el problema es que no me entraba más pues el plato era muy grande, picaba un poco pero ¡qué bueno estaba!, en la mesa de al lado estaban unos biciclinos de Murcia que luego serian compañeros de camino, al igual que los de Bilbao.


Nos despedimos y fuimos a la iglesia que está justo enfrente, pero está cerrada, a su alrededor un parque con bancos que están lleno de peregrinos comiendo y descansando. Decidimos emprender la marcha, al salir paramos en una fuente, donde había un perro con el que me hice unas fotos, después llene las garrafas y en las afueras del pueblo pase a una tienda de regalos a sellar para no tener solo el sello de Ezequiel.



Pasamos un pueblo que está casi unido a Melide se trata de SANTA MARIA DE MELIDE, a la salida nos metemos a la izquierda por un bosque de eucaliptus muy cómodo con buen firme, un poco más adelante comenzamos a bajar, apenas entra el sol, por esta corredoira vamos muchos peregrinos. Llegamos al rio Catasol y aquí hay oberbuquin pues todos tenemos que pasar por seis piedras grandes que colocadas en línea hacen de puente y como todos nos queremos hacer fotos el paso se hace más lento, paso una bici y luego la otra, al otro lado nos espera una cuesta que parte pegada al rio lo que nos obliga a empujar las bicis, por fin arriba,


A partir de aquí el camino está perfecto para disfrutar de la bici, de nuevo las corredoiras son nuestro camino, subidas y bajadas suaves que no nos exigen gran esfuerzo, llegamos a RAIDO, una pequeña pendiente nos lleva hasta lo más alto, desde arriba vemos un valle, por el que comenzamos a bajar enseguida llegamos a otro pueblo A.PEROXA en este pueblo paramos en una fuente redonda que tiene tres caños.

Había unos trabajadores cogiendo agua, después cruzamos la carretera con la música que nos acompañaba ya varios kilómetros, cuando no era Manolo Escobar era el Fari ,etc.. Así de amenizados llegamos a BOENTE, aquí entramos en una pequeña iglesia, estaba vacía mientras María rezaba yo me puse el sello, salimos de la bonita iglesia y en las afueras sello en el bar Anduriñas de Boente.

Salimos al camino y unas bajadas nos llevan sin esfuerzo por un valle muy bonito, pasamos un área de descanso, por cierto bastante concurrida de peregrinos, más adelante cruzamos un arrollo y seguimos bajando, los peregrinos hacen cola para coger agua en una fuente que está a la derecha, seguimos dando curvas sin saber lo que nos esperaba, doy una curva a la derecha y al ver la cuesta grito con todas mis fuerzas, MARI METE EL UNO, así varias veces mientras intento yo hacer lo mismo con mi cambio, pero no va el cambio tampoco y yo menos, me bajo a empujar y María da la curva cuando ve el cuestón tan empinado se le cambia la cara, unos peregrinos que estaban al lado, decían MARI METE EL UNO, riéndose uno de ellos dice ni uno ni nada esto no hay quien lo suba.

Después de tomarnos nuestro tiempo, con tan bestial cuesta conseguimos llegar arriba, (como pesa la bici cargada) mientras descansábamos echamos un trago de agua, miramos la cuesta y abajo cuatro biciclinos empujaban sus bicis, eran los de Murcia, cuando llegan arriba el más adulto dice, ¿esta cuesta es una traidora? y el compañero dice ¿ No te esperas algo así ? se pararon al merecido descanso y nosotros a pedalear, esta vez una carreterilla nos lleva bajando por un bosque a CASTAÑEDA donde paramos a sellar en Café No Camino y en Pensión Santiago.

Nos ponemos en marcha y comenzamos a subir esta vez es más llevadero aun así tenemos que parar arriba a descansar y la historia se repite, al principio de la cuesta vienen los de Murcia, llega arriba el de la corneta y deja su bici, allí se baja para empujar a su hermana, cuando llegan arriba nosotros partimos, comenzamos a bajar por un bosque de eucaliptos y pasamos el pueblo de DOROÑA, pero no paramos pues es cuesta abajo y las bicis van solas, desde aquí a toda velocidad nos acercamos a otro sitio emblemático del camino, RIBADIXO, el Rio Iso de piedrecitas transparente junto al albergue de Ribadixo, en el rio el grupo de Italianos ya conocidos por encontrarnos muchas veces en el camino, se están metiendo en el rio y al pasar levantan los brazos para la foto, de pronto llega el grupo de los Murcianos y nos hacemos unas fotos en el puente, aunque estas estarán en su cámara, después entré a sellar en el albergue, mientras María sigue carretera arriba.

Luego llego mi turno y la subo, eso si empleando el cambio, llegamos al lado de la carretera y el camino gira a la izquierda, pero al otro lado veo los peregrinos , cruzamos la carretera que tiene poco tráfico y salimos al camino, cuando llegan los de Murcia nos preguntan cómo es que estamos delante, pues nos pasaron en la subida, le cuento el truco de la carretera y me dice que han dado mucha vuelta para pasar por un túnel, tal vez sea para evitar el peligro que conlleva cruzar las carreteras, pero hay tramos que no haces más que cruzar de un lado a otro, estamos entrando en ARZUA y al igual que en Melide los coches aparcados a los lados y muchos peregrinos más todos los biciclinos que entramos en pelotón, con los de Murcia al frente al fondo el grupo de Franceses, me pregunta el corneta que es el cabecilla de los de Murcia, si sé dónde está el albergue Don Quijote, le digo que ni idea, se despiden y giran a la derecha por una calle empinada, nosotros vamos de frente y a escasos 100 metros paro a sellar en el albergue Don Quijote, el que buscaban los de Murcia, un poco más adelante las flechas nos llevan por una calle empedrada al albergue de la Xunta, seguimos la flecha y nos lleva a la iglesia, donde sellamos.

Al salir vemos el cartel y la flecha que nos conduce a nuestro albergue Via Lactea, se trata de un edificio del que han cogido el local para hacer habitaciones con 15 literas dobles y con paredes de 210 de altura aprovechando el alumbrado del local en el mismo techo, el problema es que cuando la luz se enciende en otra habitación molesta al resto de habitaciones por estar todas juntas, por fin llega el hospitalero se llama Alfonso, le digo mi nombre y busca en la libreta llena de nombres y tachones y no me encuentra, nos lleva a los famosos cuartos y nos dice no tengo nada, nos propone dormir en el suelo en el cuarto de lavadoras, le comento que si fuéramos más jóvenes no nos importaría dormir donde fuera, pero con 50 años ya no estamos para estos trotes, me niego y le digo que saque la libreta, mirando despacio por fin me encuentra, le comento que cuando llamé le recalqué que mi mujer tenía que ser en litera de abajo por su problema en la rodilla y se acordó de esto, nos llevo al 2º cuarto y nos dio las camas estas con un hueco al lado donde una cortina hace de puerta, metemos todo y al final Alfonso entendió el mensaje, ha habido suerte.

Mientras María se ducha yo hago las camas, después mi turno y más tarde el lavado de la ropa, las cuerdas están abarrotadas de calcetines, gallumbos, camisetas etc.. Con los deberes hechos nos fuimos al pueblo y antes de salir Alfonso nos manda a un bar que se come bien y hay buen pulpo, damos un paseo por la plaza y pasan dos señoras les pregunto por la pulpería y me dice que como en Melide nada, que su marido que en paz descanse era de allí y es un pueblo más rico, la otra dice que no, charlando ellas sin parar pues somos su mejor entretenimiento, nos despedimos y allí se quedaron con lo que me imagino les duraría toda la tarde.

 Por la calle encontramos un supermercado, compramos plátanos, lazos, batido y un paquete de helados Magnum, nos los fuimos comiendo y estaban muy buenos aunque eso si los últimos se empezaban a derretir, nos fuimos a la Oficina de Turismo está situada en un costado de una casa y es un quiosco donde nos sellan y nos dan planos de las etapas y algún folleto de lo que nos quedaba y que adjuntamos a nuestra colección.

Desde aquí nos fuimos a cenar, el sitio estaba bien pero la cena no valió nada y el pulpo menos, no siempre se acierta, de aquí al albergue a descansar, nos echamos en la cama y hacemos amistad con un chaval y tres chicas de Valladolid, Salamanca y León, el chaval me dice que su pueblo es Calzada de Coto por donde pasa el camino de Santiago, preguntamos que de donde salieron, nos dicen que de Sarria, pues la chica de Valladolid tenía una operación en la pierna y no podía empezar más lejos.

Después nos fuimos al salón y cogimos unos libros del camino a pie y en bici, nos tumbamos en los sillones, estábamos tan a gusto y llega Alfonso el hospitalero con un matrimonio de jóvenes, les dice que si quieren dormir aquí tienen que esperar a que se acuesten todos, en uno de los libros veo una foto de Calzada de Coto el pueblo del chaval, están cerca y se lo enseño se pone muy contento y me dice que al año que viene saldrán de su pueblo.

Después nos fuimos a la habitación, María se queda allí y yo me voy a ver las bicis que están en el garaje, cuando abro la puerta veo un montón de peregrinos durmiendo en el suelo y pienso que Alfonso termina por ocupar la acera del albergue, me marcho a la habitación y charlamos con el grupo de León, mas tarde los planos de lo que nos falta y María con los desniveles y las cuestas y así llegamos al final del día o eso creía yo, pero no era lo último que pasaría, tendríamos que esperar, a las 12,30 llega el grupo de chicos y chicas con su líder, el que anteriormente nos dijo que no pusiéramos el móvil en modo despertador para no molestar, es precisamente el que a estas horas no deja dormir a nadie, armando ruido, encendiendo la luz y con voces, hasta que estallé y con voz fuerte les mande callar y apagar la luz, cosa que hicieron pese a que alguno de ellos venia bebido, estos ni son peregrinos ni son nada me dijo el chaval de León y menos mal que se han callado, pasado este mal rato todos pudimos dormir.

Resumen de etapa:


VENDAS DE NARÓN – LIGONDE - AIREXE – PORTOS – LESTEDO – OS VALOS – ABENOSTRE – O ROSARIO – PALAS DE REI – ALDEA DE RIBA – SAN XIAO DO CAMIÑO – CASANOVA – LEBOREIRO – DISICABO – FURELOS – MELIDE – SANTA MARIA DE MELIDE – RAIDO – A PEROXA – BOENTE – CASTAÑEDA – RIBADIXO DE BAIXO - ARZÚA




Km. Totales 470,55
Km. Día 40.211
Velocidad máx. 44.20
Velocidad media 10.50
Tiempo total 3.50h.



Etapa 7: Sarría - Vendas de Narón

Miércoles, 8 de Agosto de 2007

Etapa 7: Sarria – Vendas de Narón


Amanece en Sarria, la luz del día entra por el ventanuco del techo abohardillado, me levanto con cuidado para no darme un coscorrón y miro por la mini ventana el cielo y veo unas brumas, pero es muy pronto y todavía no ha abierto el día, miro a María y está profundamente dormida, decido no despertarla pues bastante bien lo está haciendo con las palizas que lleva más la lesión de su rodilla, está cumpliendo con creces la dureza del camino, estoy más que orgulloso de su fuerza, de su tesón y su voluntad .

Me vuelvo a acostar, la verdad es que esta pequeña habitación está fenomenal pues podemos tener cierta intimidad y el equipaje esta a buen recaudo. Viendo los techos y con un dolor en las piernas que no se me quita, pienso que dentro de una hora estaremos pedaleando y sin quererlo me quedo dormido. Pronto suena la alarma del móvil y con dolores comenzamos a levantarnos, el réflex hace acto de presencia en mi espalda, en el cuello y ¡cómo no!, en las piernas, después el turno de María. Preparamos las alforjas y bajamos para abajo, en la parte trasera del albergue nos esperan las bicis que están en un cobertizo, miro la rueda de María y como todos los días está pinchada, saco la bomba y comienzo a darle aire, esta coge sin perder, un día de estos tendré que perder un rato en repararla, pero eso digo todos los días , luego en la primera gasolinera le daré más presión y así tirara un día más, coloco las alforjas, después con todo listo nos fuimos a la puerta principal, mientras Edu y yo hablábamos con José el Hospitalero, María escribía en el libro del albergue agradeciendo su hospitalidad en un momento en el que estábamos desmoralizados, esto debe de ser lo que llaman una luz en el camino, nunca mejor dicho.
Poco después nos despedíamos, salimos los tres a la calle principal, buscando un sitio para desayunar y lo encontramos: Pastelería Yoli, un nombre muy emotivo porque así se llama nuestra hija, aparcamos las bicis y me doy cuenta que no tengo el bidón del agua, me vuelvo al albergue pues la noche anterior lo guarde en el congelador y allí estaba, se puso muy contento al verme y es que también quiere llegar a Santiago.

No tardo nada en volver y enseguida estábamos pidiendo el desayuno, por cierto éste estuvo muy bien, después de poner el sello, salimos a coger nuestras máquinas, seguimos la calle principal y casi al final giramos a la izquierda y esta calle nos conduce a la salida, aquí se plantea la duda pues el camino primitivo sale a nuestra izquierda y la carretera de Portomarín a la derecha, saco el mapa para ver que hacemos, pero este tramo indica que tiene subidas súper fuertes aunque eso sí es mucho más corto, en el mapa de ruta el camino cruzaba la carretera en el kilometro 9 y al igual que hicimos en Samos, decidimos separarnos.

Quedamos en esperarnos en el cruce, comenzamos a subir por un buen arcén pero las cuestecitas se las traen, la carretera no tiene apenas tráfico, me doy cuenta que nos desviamos mucho a la derecha, después de un rato subiendo llegamos a un cruce que indica Barbadelo, a 4 kilómetros los mismos que llevamos desde Sarria hasta aquí, la dirección sigue rumbo a la derecha, que vuelta tan grande estamos dando, pero ya no tenemos elección pues después de lo que hemos subido cualquiera se da la vuelta, seguimos carretera adelante y comenzamos a tener las piernas cansadas, al fondo unas casas, llegamos a GRANXA en donde se encuentra la placa al peregrino Remy, paramos a descansar un poco y de nuevo a pedalear.

Nos adelantan biciclinos, un grupo de todas las edades, el último se queda a nuestra altura y vamos hablando, nos pregunta lo típico, ¿dónde empezamos?, me dice que son de Bilbao y empezaron en Burgos, llevan furgoneta grande de apoyo lo que les permite que ellos no lleven peso y las cuestas sean un poco menos pesadas, nos ofreció que si queríamos nos llevaba nuestro equipaje para que no nos costara tanto subir, le dijimos que no, que seguíamos el camino tal y como lo habíamos empezado, nos acompañó un buen rato charlando con nosotros, después se despide, pero el destino nos volvería a juntar más adelante.

 El siguiente cruce a nuestra izquierda indica Mercado da Serra y seguimos rumbo a la derecha, nos adelantan un grupo de biciclinos franceses con una niña en cabeza poniendo el ritmo, no tendría más de 10 años y ¡como subía con sus alforjas! Estamos casi coronando y la carretera por fin cambia de dirección, miro el mapa y estaremos a unos 6 kilómetros del cruce, de pronto comienza la bajada, dejamos correr las bicis y cogemos al grupo de biciclinos Franceses, al fondo vemos un cruce donde nos espera Edu, nos dice que acaba de llegar, no nos lo podemos creer pues nosotros dimos mucha vuelta, aunque todos los biciclinos iban por este recorrido, le pregunto a Edu que tal el camino, me comenta que menos mal que nos fuimos por la carretera, pues el camino era durísimo y que tuvo que bajarse varias veces a empujar la bici, desde allí nos fuimos a un mesón que esta a escasos 50 metros.

Como vemos la masificación de peregrinos decidimos llamar para reservar cama y encontramos en Vendas de Narón, después pasamos al mesón sellamos y salimos al camino para alcanzar a María, dejo atrás a Edu y comienzo a pedalear fuerte para cogerla, entro en un pueblo llamado A.PENA me detengo a sellar, está a tope de peregrinos, hay cola para pedir en la barra, cola en los servicios y también para sellar. Después de esto cojo la bici y a pedalear ,al fondo veo a María, cuando llego a su altura me pregunta por Edu le digo que viene detrás, cruzamos un arroyo y unos metros más adelante, comienza una carreterilla por la que seguimos hasta un pueblecillo llamado LAVANDEIRA, seguimos el camino, más adelante pasamos por un tramo en el que el agua sale por todos lados, las losas del camino están mojadas con lo que extremamos las precauciones para no caernos, llegamos a otro pueblo A.BREA pasamos y comenzamos a bajar hasta otro pequeño arroyo, después comenzamos a subir el camino se estrecha y comienza una corredoira.


Al fondo vemos que los peregrinos se detienen cortando el paso cuando llegamos nos pusimos muy contentos se trataba del kilometro 100, nosotros nos detuvimos pues teníamos muchas ganas de llegar aquí, aun tengo el recuerdo de los primeros 100 kilómetros donde María en una cuartilla se hizo su mojón particular, las fotos aquí son casi trofeos.



Después de esto el camino se convierte en un montón de pedruscos, en el centro unos bordillos de granito de más de un metro de largo, por los que tenemos que ir empujando las bicis, este tramo es cien por cien inciclable, nos cuesta bastante pasar esto, después una corredoira nos lleva a enlazar con una carreterilla por la que después de un rato pedaleando llegamos a FERREIROS, paramos en el bar del cruce a sellar y compro coca-cola y acuarios y nos sentamos en la mesa del área de descanso.

Después de un rato llega Edu, saco la caja de pastas que compre en Castrojeriz le doy a María y a Edu, estamos comiendo las famosas pastas y pasa un matrimonio de Barcelona que estaban con nosotros en el albergue A Pedra y también les doy pastas, después María se tumba en una hamaca y le hago unas fotos, guardo la caja de pastas y retomamos el camino y llegamos a un cementerio que está pegado al camino, este no tiene muros alrededor, enseguida las casas del pueblo FERREIROS, aquí hay refugio y varios bares pero como es bajada y vamos lanzados no paramos ni a sellar, este tramo esta súper poblado de peregrinos y tenemos que pasar despacio, el siguiente pueblo que pasamos es A.PENA, seguimos pedaleando y la subida aunque suave continua, llegamos a COUTO las flechas nos guían porque de lo contrario no hubiésemos llegado a Portomarin ni en tres días, digo esto porque es un autentico laberinto, tan pronto giramos a la derecha como a la izquierda, da la impresión que vamos en ziz zaz.

Así llegamos a otro pueblo MOIMENTOS pasamos este y aquí comienzan unas corredoiras con trampa, pues cuando parece que el camino está bien, de repente bajadas con grandes piedras, que con el peso de las alforjas la bici pierde manejabilidad, en más de una nos tuvimos que bajar, en una de estas patino la rueda delantera y estuve a punto de caerme, aviso a María del peligro, miro para atrás y veo a Edu con los dos pies patinando por el suelo, cuando llega a mi altura me dice ( no veas Rossi casi me caigo ), después de estas bajadas con piedras, cruzamos una carretera y entramos en otro pueblo COTARELO sus calles hechas de piedras con cemento ponen a prueba la horquilla de la bici, también la dentadura y el trasero por los continuos rebotes.

Más adelante una bajada nos lleva a toda velocidad a la Cruz que está en MARCADOIRO este pueblo es parecido a los anteriores, como es bajada lo llevamos bien por unos caminos, gracias a Dios llenos de flechas llegamos a un cruce desde donde vemos por primera vez Portomarín, estamos a unos 7 kilómetros, pero desde aquí es todo bajada, comenzamos por una carreterilla llena de curvas, cuando mejor vamos se acaba la carretera y comienza el camino con fuertes pendientes, además los peregrinos invaden el camino y no te oyen llegar, de nuevo otra vez carretera esta vez con unas pendientes bestiales, con mucha arenilla en los lados además las curvas se las traen, damos una curva y el asfalto está lleno de piedrecillas, pasamos esto y el susto fue notable, después de esto vimos el pantano y sin apenas pedalear llegamos al puente.

Me detengo a hacer unas fotos y veo a María tan chula por el centro de la carretera, quizá acostumbrada a ir sin coches se ha descuidado, paro en el puente y a la derecha veo el antiguo puente romano medio sumergido así como los muros de las casas rodeados de agua, que se ven al estar el pantano muy bajo, al final del puente nos esperan las escalinatas y el arco, estos muy fotografiados por los peregrinos. PORTOMARÍN nació y creció al lado del puente romano sobre el rio Miño (reconstruido en la Edad Media ) antiguamente paso obligado por los peregrinos, hoy en día un moderno aunque estrecho puente cumple esta función. El pueblo está formado por dos barrios, San Nicolás y San Pedro.

Después de un rato haciendo fotos y disfrutando del paisaje, decidimos subir al pueblo, Edu y yo por la cuesta empinada, María tomo un atajo, a Edu y a mí nos costó subir aun llevando la loca, cuando llegamos María ya estaba en la plaza, aquí todo gira en torno a la iglesia de San Nicolás, erigida por los monjes caballeros de la orden de San Juan de Jerusalén en el siglo XII, se desmontó piedra a piedra , aun puede verse la numeración de las piedras en el costado derecho, pasamos dentro a verla, María una vez más rezo como hace en todas las que pasamos, sinceramente creo que aparte de pedir que lleguemos bien a Santiago, también pide que nos de fuerzas, que es lo que más notamos en falta.

Sellamos la credencial y salimos a hacernos unas fotos en su entrada, más tarde me fui a recoger sellos para mi colección, entre en un supermercado y le dije a la señora que metiera un batido en el congelador, para recogerlo más tarde, regreso a la plaza donde me esperan María y Edu, están hablando de que Edu quiere alargar un poco más la etapa y esta telefoneando a albergues en Palas de Rei, donde consigue una litera, luego nos despedimos, la verdad es que nos pareció bien su decisión, pues nosotros con más de 400 kilómetros en nuestras piernas, teníamos a estas alturas un ritmo más lento y en definitiva nuestra meta es llegar, además queríamos disfrutar del camino.



Entramos en el Ayuntamiento donde una señora nos hizo fotocopias de las etapas en Galicia, así como teléfonos de algunos albergues, según parece desde Sarría a Santiago los problemas para encontrar litera están al orden del día, creando otro quebradero de cabeza, al no saber si encontraras donde dormir, salimos del Ayuntamiento y nos fuimos al supermercado a recoger mi batido y unos lazos.



Meto todo en las alforjas y cogemos la calle abajo, vamos lanzados llegamos a la parte baja del pueblo y giramos a la derecha, comienza una cuesta arriba que nos mete el miedo en el cuerpo, cuando llevamos 400 metros de durísima cuesta llegamos a un cruce por donde salen los peregrinos del pueblo, desde la iglesia aquí hay 100 metros, hubiésemos tardado unos minutos y en llano, que desastre, me molestó un montón este fallo, pero ya no tiene remedio, paramos a descansar y después retomamos el camino, la cuesta se pone cada vez más dura, estamos subiendo el Monte Do Cristo de 464 metros de altitud, puede parecer poco pero al fondo tres biciclinos coronan la cuesta empujando sus bicis, eso es lo que nos espera un poco más arriba, pasamos la parte dura y la cuesta aunque sigue subiendo, ahora es más llevadera, llegamos a unas granjas avícolas que están a la izquierda del camino, vamos paralelo a la carretera tan solo nos separa un seto con abundantes hojas, después de este tramo, el camino más adelante nos obliga a cruzar la carretera, como la señal indica, cruzamos y hay un pequeño pueblo cuyo nombre es TOXIBO, de nuevo otro camino, comenzamos a subir más resguardados del sol, a nuestra izquierda los pinares, a la derecha una valla de piedras guardan un hórreo muy grande, paramos a descansar y al fondo vemos venir a una peregrina, cuando llegó a nuestra altura, nos pregunto ¿cuanto queda para el próximo pueblo?, miro el mapa y le digo que a unos 4 kilómetros, nos comenta que no tiene cama apartada, le decimos que nosotros sí que apartamos 3 literas pero que nuestro amigo Edu decidió alargar la etapa, por lo que está reservada, le decimos que si la quiere, pero nos comenta, que está cansada y que se quedará en el próximo pueblo, después nos despedimos ( buen camino),

Comenzamos a pedalear ahora con buena sombra pues los pinares cierran el camino, pero ¡cómo no! seguimos subiendo, este tramo es muy bonito y llevadero, pero las fuerzas son nuestro enemigo, después de 3 kilómetros llegamos a un área de descanso con bancos, donde un grupo de peregrinos descansan y uno de ellos cura sus ampollas, aquí hay una fuente que a juzgar por el color de su agua debe de tener mucho hierro, los peregrinos que allí estaban la apodaron la fuente del óxido, estábamos descansando y charlando con los peregrinos y de repente un frenazo y una sonora pitada de un coche, se trataba de dos biciclinos Italianos que para entrar al área de descanso giraron uno para un lado y el otro al contrario, dieron un buen susto y entraron discutiendo de quien tenía o no la culpa.

 Proseguimos nuestro camino y un poco más adelante llegábamos a GONZAR donde nos paramos a comer, nos sentamos en la terraza y pedimos el menú del peregrino, nos sirvieron de primero ensalada completa y de segundo pollo en salsa, para María muslo y para mi pechuga, eso si se notaba que era pollo de corral, todo con patatas fritas y de postre helado, a mitad de la comida llego Maribel la peregrina y nos dijo que si todavía teníamos la cama apartada, le comenté que acababa de llamar para anularla, volví a llamar y me la guardaron, estuvimos hablando mientras comíamos, María le preguntó que como se atrevía a ir sola, ella nos contesto que no pasaba nada, fue entonces cuando Maribel se puso la mochila y nos dijo que ya la cogeríamos.

Después de comer y descansar un poco nos despedimos y cogimos el camino, ¡cómo no! cuesta arriba, no tardamos en cogerla, ( adiós ya nos veremos en el albergue). Poco después pasamos CASTROMAIOR y luego yo me adelante un poco dejando a María subir a su ritmo, llegué a otro pueblo HOSPITAL DA CRUZ y tuve que retroceder, aquí está un poco liado, pues las flechas te llevan al albergue y de hay vuelta atrás, con una cuesta como para reírse, aquí pregunté a unos peregrinos y uno de ellos era hospitalero en el albergue de Ligonde, éste me indico el camino, pase el puente y llamé a María y le indique para que no cometiera el mismo error que yo, por fin llegue a VENDAS DE NARON, enseguida encontré el albergue O Cruceiro, este lo lleva una familia por cierto bastante bien, justo al lado una pequeña iglesia o capilla, llega María y nos dan las camas y me comenta Adelina la hospitalera que la otra cama la tiene en el otro edificio y allí hospedaría a Maribel.

Después de una reparadora ducha María se puso a lavar la ropa y yo a tender, al rato llegó Maribel a lavar la suya, llamé al Albergue de Arzua para reservar dos literas para el día siguiente, mas tarde mientras arreglaba la cremallera de las alforjas, María y Maribel se sentaron en la puerta al sol contando cosas del camino, quedamos para ir a ver tiendas shooping, es decir al otro albergue a verlo y tomar algo.


El albergue estaba justo enfrente, Casa Molar nos tomamos unas coca colas, el bar tiene una puerta trasera que cada vez que la abren aparte de frio, entra un olor a caca de vaca que no te digo nada, después nos fuimos a cenar a nuestro albergue y Adelina nos puso un caldo gallego, huevos fritos con bacón y los míos con chorizo, de postre tarta de Santiago, estuvo bien.

En el comedor había tres biciclinos que con libreta en mano, apuntaban todo tipo de anécdotas del camino, en ese momento yo le dije a Adelina qué me iba a ver tiendas y al cine y ella me contesto que no le sacara la entrada porque esa película ya la había visto, esto sonó a chiste y los peregrinos se partían de risa, dado que el pueblo son dos casas, es decir los dos albergues, ni cortos ni perezosos, los biciclinos apuntaron esto en su libreta, deje pasar un rato para no levantar sospechas, minutos después comento para que me oigan sin querer ¡qué pena de las bicis que hay en la calle, hay una pinchada!, mañana la tendrían que arreglar los supuestos dueños, con lo mal que sienta, de pronto salen corriendo para la calle, pues se creyeron lo del pinchazo, cojo la libreta que han dejado en la mesa y escribo en mayúscula, ¿Habéis picado con el pinchazo?, cuando regresan nos partimos de risa y al ver lo de la libreta dicen que esto es lo mejor del día partiéndose de la risa.

 Me preguntaron ¿qué tal la subida al O Cebreiro?, le digo bien, si supieran como subimos las cuestas no sé quien se reiría mas, después de cenar pasamos un buen rato charlando con los peregrinos pues era lo único que se podía hacer en ese pequeñísimo pueblo, poco a poco los peregrinos se despedían y tomaban el camino al merecido descanso, es decir la reparadora cama, después nos llego el turno, nos despedimos de Maribel, los biciclinos, y nos fuimos a dormir. Ya en la cama, el ritual del réflex y a mirar la etapa del día siguiente, tardamos poco en dormirnos aunque eso sí con nuestros dolores.


Resumen de etapa:

SARRÍA – BARBADELO – GRANSA – A PENA – CORTIÑAS – LAVANDEIRA – A BREA – MORGADE – FERREIROS – COUTO – MOIMENTOS – COTARELO – MARCADOIRO – A PARROCHA – VILACHA – SAN PEDRO – PORTOMARIN – TOXIBO – GONZAR – CASTROMAIOR – HOSPITAL DA CRUZ – VENDAS DE NARÓN.


Km. Totales 430,34
Km. Día 36.453
Velocidad máx. 42.80

Velocidad media 9.60
Tiempo total 3.46h.